viernes, 1 de diciembre de 2006

Pechopalomo a la conquista de París (primera parte)


Hace escasamente un par de horas he pisado suelo galo, en un aeropuerto de la periferia (muy periferia) de París que se encuentra a unos 80 Km. de la capital y que básicamente debe ser utilizado para el transporte de pienso de alta calidad para las vacas francesas.

El viaje en avión via Girona-Ryanair ha ido "smooth", incluyendo el hecho de que, al no tener que facturar maleta, me han dado un pase de embarque "quick" (algo tipo VIP, el cuál sólo teníamos 12 personas). Tema azafatas (inevitable): una rubia y una morena. La rubia bastante clasicota (moño en ristre y mucho colorete, sobre todo que no falte), mientras que la morena llevaba un peinado tipo Miss Kittin en sus buenos tiempos con The Hacker que me ha puesto palote-palote (no era nada del otro mundo, pero tenía su puntillo morboso, sobre todo cuando le ha llamado la atención a un par de gilipuertas que, mientras el avión maniobraba para aparcar en la pista, se habían levantado para sacar sus maletas). Banda Sonora en mi iPod: Vincent Delerm "Kensington Square" (para ir ambientándose..)

Al coger el autobús que nos llevaría del aeropuerto-granero a la Ciudad de la Luz, ha subido al mismo una italianita de Firenze categoría "palote-palote". El problema vino (cómo era de esperar) cuando abrió la boca (lo que no quiere decir que siempre que la abra haya de causar problema alguno...) y le empezó a emanar el paverio por todos los lados. El autobusero le preguntaba en francés si el billete era de ida o de ida y vuelta, y la Firenzina no hacía más que decirle en castellano "no te entiendo", a la par que esbozaba una sonrisita entre pizpireta y gilipuertas. Para que os hagáis una idea, que un servidor (con su francés del estilo "Je ne pas mariconé") tuviese que explicarle a la Firenzina lo que le estaba preguntando el autobusero... Banda Sonora en mi iPod: Burruezo & Bohemia Camerata "Barcelona Intimíssimo Café" (es que el viaje de noche y en bus es muy bucólico...)

Al llegar a París, mi buen amigo Vicenç (que es el que me está dando cobijo durante este fin de semana) no ha podido venir a buscarme a la estación, así que he cogido un taxi a expensas de que me tangara con la tarifa. He intentado hacerme pasar por francés, mascuyando palabras rápidamente y poniendo la boquita de piñón para que pareciese todo muy fluido: con la primera frase funciona, pero a la que entra en juego la respuesta del interlocutor.... uf! Pero más o menos me he hecho entender (mi año de francés en la academia ha servido para algo, aunque sea muy mínimo). De todos modos, el taxista ha sido muy legal y me ha cobrado justo lo que aparecía en el contador del coche.

Cuando he llegado a casa de mi amigo Vicenç, hemos tenido el tiempo justo para que me explicase las cuatro cosas básicas de logística (llave, lavabo, etc.) y se ha ido a trabajar. He aprovechado para darme un garbeo por el barrio, el cual parece una Petite Cabiria, con multitud de negocios regentados por magrebíes. Me he acercado a uno de estos establecimientos para pillarme algo de cenar y me he comprado algo llamado "Greec Sandwich": un kebab dentro de un bocadillo y recubierto de patatas fritas (es monstruoso y le pega tres patadas a la Triple Whopper del Burger King). Me he quedado como un Dios: ¡imaginaos que hasta que parece que me ha curado del resfriado que vengo arrastrando!

Bueno, eso es todo de momento durante las primeras horas de mi estancia en tierras galas. Mañana más...

P.D.1 Cómo pida un brioix en una cafetería y me pongan un madaleno (como hicieron en el Cacao Sampaka), la lío.... Seré español y con poco mundo, PERO NO TONTO...
P.D.2 Hay que ver lo gay que queda el Windows en francés (es que el PC de mi amigo Vicenç lo tiene instalado en el idioma de Voltaire)

2 comentarios:

Unknown dijo...

Has comprovado ya que existe el briox francés, alias Madaleno? Porque de eso se trata el viaje, en realité.

El erótico enmascarado dijo...

De momento lo único que he hecho es comprarme en una de las máquinas de vending del metro un paquete de madalenas (con forma de madalena). Ergo, lo del briox francés debe ser una patraña de los del Cacao Sampaka. Mañana echaré un ojo en alguno boulangerie y, en la medida de lo posible, le haré una foto.